Recordatorio

Los hombres despechados creen que todas las mujeres son maracas. Mientras las minas pensamos que el error fue nuestro: "cómo tan tonta para comprarle?" o "en qué la cagué" o "por qué siempre tengo tan mal ojo!"
Bueno: "Que pena que no soy tan maraca como para hacer caridad contigo. Lata que ni las maracas te dan la pasada".
Juro de guata que ese va a ser mi próximo saludo a alguien, a un pobre weón.

Lamentablemente no sirvo para ser frágil, ni cisne blanco.

Esto es de E.E. Cummings

who pays any attention
to the syntax of things
will never wholly kiss you;
wholly to be a fool